La importancia del acompañamiento a las personas con trastorno de conducta alimentaria

Fecha: 
04/10/17
Categoria: 
General
Foto: 
Psiquiatría, Psicología, salud mental, trastorno alimentario

En la Clínica Nuestra Señora de La Paz disponemos, de una unidad específica de Infanto-Juvenil, en la que se tratan trastornos de conducta y alimentarios en adolescentes de entre 13 y 18 años.
Debido a nuestra experiencia en este campo, nuestra psiquiatra especialista María José Martín, fue invitada a las XLII Jornadas de Delegados de Pastoral de la Salud organizadas por la Conferencia Episcopal.

Durante su intervención, la psiquiatra quiso centrarse en los trastornos de la conducta alimentaria “patologías muy frecuentes en los adolescentes en la actualidad, aunque en la mayoría de los casos, en especial en la adolescencia, no es la patología primaria, sino que es el síntoma de otro problema más profundo como la ansiedad, la depresión, los problemas familiares, de relación social, el mismo ambiente social que presiona al adolescente...etc.”. Por este motivo alerta de la necesidad “de un adecuado diagnóstico dirigido a lograr un tratamiento eficaz”.

Las personas que presentan estos trastornos sufren en gran medida, al igual que sus familias que las suelen acompañar en el proceso de la enfermedad.

Para la psiquiatra, es fundamental realizar un buen acompañamiento del adolescente enfermo y su familia para lograr una recuperación más estable en el tiempo. Por ello, considera de vital importancia seguir las siguientes indicaciones:

- Acompañar al paciente: realizar un acompañamiento para proveer seguridad, confianza y disminuir los miedos, mediante una escucha activa
- Favorecer la expresión de sentimientos: rabia, tristeza, alegría
- Favorecer la reflexión ante la toma de decisiones (con el fin de evitar la impulsividad)
- Propiciar que la familia acompañe (que esté presente en reuniones comunes)
- Promover los aspectos positivos familiares (comer en familia, conversación amena, distraer)
- Favorecer la resolución de conflictos (hablar de ellos, no evitar ni negar)
- Señalar los aspectos negativos (evitar delante del adolescente): sobreprotección, expectativas muy altas hacia los hijos que no pueden cumplir, padres ausentes, clima tenso o agresivo a nivel familiar, poco afectuoso, cambio de roles familiares, familia sin límites...

También explicó algunas pautas a tener en cuenta ante las comidas y cómo comportarse con los adolescentes ante determinadas circunstancias.
Para finalizar, Mª José Martín quiso hacer hincapié en la importancia del abordaje precoz en las personas que sufren un trastorno de la conducta alimentaria. Fundamental para su recuperación.