Monjas de Clausura se forman en cuidados de Enfermería en Sevilla
Varios conventos de clausura de Sevilla han participado ya en el Plan de formación, atención y seguimiento para el cuidado de enfermos y mayores asistidos en conventos de clausura que ha diseñado la Orden Hospitalaria San Juan de Dios en el hospital de Sevilla y que pretende extenderse al resto de la provincia Bética tras una más que positiva evaluación de resultados.
Este programa piloto formativo surge ante la necesidad de que las monjas mayores o enfermas que viven en clausura pudieran recibir cuidados de enfermería de mayor calidad por parte de las hermanas cuidadoras del propio convento, pues mientras no se trate de problemas de salud severos que conlleven hospitalización, las monjas se cuidan en sus monasterios gracias a la labor de las monjas cuidadoras.
Una vez superada la primera fase teórica, las monjas cuidadoras que así lo han solicitado acuden al hospital sevillano de san Juan de Dios para poner en práctica los conocimientos teóricos que han adquirido, siempre bajo la supervisión y tutela de los profesionales de enfermería del centro. Se trata de un hecho curioso, pues al tratarse de religiosas que residen en conventos de clausura su presencia más allá de los muros de sus monasterios resulta prácticamente anecdótica. Hasta el momento, para la realización de estas prácticas han pasado por las dependencias del centro las hermanas Jerónimas de Constantina, que han concluido su participación en esta acción formativa; las hermanas Cistercienses del convento de San Clemente y las Mercedarias de Marchena.
Este Plan de Formación ha impartido su fase teórica hasta ahora en los Monasterios de Nuestra Señora de los Ángeles, de Constantina; Santa María la Real, de Bormujos; San Clemente y Santa Ana, de Sevilla; y San Andrés, de Marchena a seis congregaciones.
